Los pediatras dicen una cosa, la ley dice otra, los fabricantes otra completamente diferente… ¡y hasta tu cuñado opina distinto sobre el tema! ¿A quién tienes que hacer caso entonces? ¿¿¿Hasta cuándo tiene que ir un bebé a contramarcha en el coche??? Lo cierto es que este debate no tiene visos de que vaya a terminarse en un futuro cercano…
Pero se trata de un tema de suma importancia. Al fin y al cabo, estamos hablando de la seguridad de nuestros hijos… Por eso, hemos creído conveniente crear este artículo, que pueda servir a aquellos padres confusos que, lejos de querer polemizar más y más sobre el tema, quieran lo mejor para sus pequeños. Así que, si quieres saber hasta qué edad tiene que ir el bebé a contramarcha, aquí te lo diremos. De padre a padre.
¿Hasta cuándo es obligatorio llevar el bebé a contramarcha?
Empecemos echando un vistazo a lo que dice la normativa de circulación al respecto: ¿cuánto tiempo dice la ley que hay que llevar un bebé a contramarcha? El Reglamento General de Circulación, desde su última modificación en el año 2015, estipula la obligatoriedad de llevar los bebés a contramarcha hasta los 9 kg de peso (lo que puede equivaler a los 10 primeros meses de vida del niño).
Además de eso, dice que, desde los 9 kg de peso y hasta que el bebé alcance una estatura de 135 cm, deberá viajar en un sistema de retención infantil adecuado a su talla y peso. Durante este tiempo, dicho sistema de retención infantil podrá ser colocado tanto a contramarcha como a favor de la marcha, en función de lo que los padres o tutores legales del niño estimen oportuno.
No hace falta decir que, a ojos de los pediatras y de muchos padres, estas medidas son claramente insuficientes. Que los niños puedan dejar de utilizar la sillita del coche al superar los 135 cm de estatura o que puedan viajar sentados a favor de la marcha al llegar a los 10 kg de peso es algo incomprensible, cuando lo que estamos tratando aquí es la seguridad y la protección de los niños al viajar en coche.
En muchos países de Europa, está comenzando a implantarse una nueva normativa en lo referente a la homologación de los sistemas de retención infantil para vehículos. Se trata de la normativa «ECE R129», también conocida como «i-Size». Esta ley mejora notablemente los criterios de seguridad para con los niños, ya que contempla la obligatoriedad de mantener los bebés a contramarcha hasta los 15 kg de peso (en contraposición a los 9 kg que dice la ley española), y convirtiéndolo en algo opcional hasta los 105 cm de estatura o los 33 kg, sumando el peso del bebé y el de la silla.
¿Hasta cuándo es recomendable llevar el bebé a contramarcha?
Si dejamos la ley a un lado, y preguntamos a pediatras (expertos en la salud de los niños) y a los científicos especializados en sistemas de seguridad pasiva, que cuánto tiempo es recomendable llevar un bebé a contramarcha, la respuesta es muy distinta. Eso sí, hay que diferenciar que la ley habla de tiempo mínimo «obligatorio» y aquí se habla de tiempo mínimo «recomendable».
Tanto pediatras como expertos en seguridad pasiva están de acuerdo en que lo más recomendable, para proteger la integridad de los niños en caso de accidente, es llevarlos a contramarcha hasta los 4 años de edad, como mínimo. Incluso aconsejan mantener la orientación a contramarcha hasta los 7 años, siempre que sea posible.
El porqué de este criterio es fácilmente entendible: porque es mucho más seguro para los bebés en caso de accidente. De hecho, también sería lo más recomendable para los adultos, ya que, insistimos, es mucho más seguro.
El motivo lo encontramos en el tipo de impacto más común en los accidentes de tráfico: el impacto frontal y el fronto-lateral. En caso de un accidente de este tipo, si el niño viaja a favor de la marcha, los arneses de seguridad retendrían el torso sujetándolo contra el asiento, pero la cabeza del niño sufriría una brutal sacudida hacia adelante fruto de la inercia del impacto. Los músculos cervicales de los niños menores de 4 años todavía no están lo suficientemente fortalecidos como para sufrir tales sacudidas, lo que equivaldría a sufrir serios daños o incluso un desenlace fatal.
Podemos ilustrar la importancia de viajar a contramarcha con un par de datos muy elocuentes:
- En un impacto frontal a solo 50 km/h, la inercia hace que el peso de cualquier objeto se multiplique por 30 aproximadamente. Ahora imagina un bebé sentado a favor de la marcha, y cuya cabecita pesa solo 2kg. En un impacto así, la cabeza del niño sacudiría el cuello con una fuerza 30 veces superior, es decir, de ¡60 kg! Ni siquiera el cuello de un adulto podría soportar algo así… Viajando a contramarcha, la cabeza del niño estaría apoyada en la propia sillita, y no sufriría sacudida alguna.
- El segundo dato que puede ayudarnos a abrir los ojos ante la importancia de viajar a contramarcha es el hecho de que el riesgo de sufrir lesiones graves o incluso la muerte en un accidente es ¡5 veces más alto! cuando se viaja a favor de la marcha. Esto es debido a que, sentado en sentido de la marcha, el cuerpo del niño queda expuesto a la energía cinética del impacto, mientras que, sentado a contramarcha, el el cuerpo del niño está perfectamente apoyado en el respaldo y no sufre sacudida por la inercia.
En definitiva: si te importa la seguridad y la salud de tus hijos, llévalos a contramarcha tanto tiempo como puedas. No hagas caso a quien te diga que los niños se marean, se aburren o que se dañan las piernas… ¡Porque no es cierto! Es la posicón más segura, con diferencia, en caso de accidente. Y es algo que demuestran los datos de aquellos países en los que la ley obliga a llevar los niños a contramarcha durante más tiempo: son los países con menor índice de mortalidad de niños en carretera. Así que, por favor, por tus hijos, llévalos a contramarcha todo el tiempo que puedas.